jueves, 7 de marzo de 2013

“Hagamos de la equidad de género una lucha sistemática. México lo necesita” Narro Robles, con motivo del Día Internacional de la Mujer,

INACEPTABLE, LA PERSISTENCIA EN MÉXICO DE INEQUIDAD, EXCLUSIÓN Y DESIGUALDAD HACIA LA MUJER: NARRO
 En este compromiso no podemos actuar con complacencia, advirtió el rector de la UNAM en un mensaje, con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora este 8 de marzo
Aunque en México se ha avanzado en la lucha por la igualdad de género, persisten inequidad, exclusión, injusticia y desigualdad, que son inaceptables. “En este compromiso no podemos actuar con complacencia”, advirtió el rector de la UNAM, José Narro Robles.

Sabemos que hay pendientes en los datos sobre la atención a la salud femenina y que se legisla en contra del respeto a las decisiones de ellas en torno a su cuerpo. Tampoco podemos aceptar que su trabajo muchas veces no sea remunerado o que los salarios que perciben sean menores a los de los hombres en los mismos empleos, añadió.

En un mensaje a las universitarias con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora este 8 de marzo, Narro Robles planteó la necesidad de generar políticas públicas para ampliar las oportunidades de estudio y empleo para las jóvenes, abatir el rezago escolar y los niveles de analfabetismo, y exigir que acabe la violencia física, sexual o psicológica contra ellas porque, lamentablemente, es una más de las expresiones frecuentes de la desigualdad.

Tampoco, estableció, podemos aspirar a una sociedad plenamente democrática, mientras persistan desigualdad, discriminación y violencia contra la mujer. “Hagamos de la equidad de género una lucha sistemática. México lo necesita”, sostuvo.

El rector consideró que en materia de derechos de las mujeres hay avances en nuestra sociedad. Es mucho lo alcanzado en la búsqueda de un mundo en el que la equidad sobrepase a la retórica, y se destierren prácticas y tradiciones que las afectan o disminuyen, pero falta mucho por hacer.

Además, resaltó la creciente participación femenina en la vida social, económica, política y cultural de nuestro país; su presencia en la educación y en el mercado de trabajo en los últimos lustros, que desmiente las viejas ideas sobre su papel tradicional en la sociedad; así como su desempeño en la educación media superior y superior, donde tienen un rendimiento y una eficiencia terminal mayores.

También, en nuestro ámbito universitario, donde ya son predominantes en algunas áreas del conocimiento, lo que refuerza nuestra convicción de que es necesario ampliar sus oportunidades en todos los espacios de la actividad humana, algo que, sin duda, es el mejor de los caminos para alcanzar un mayor bienestar en nuestra sociedad, finalizó.